TÚNEZ
África del Norte
Revisado 19-11-2016
Revisado 19-11-2016
Capital: Túnez
Forma de gobierno: República presidencialista
Independencia (de Francia): 20 de marzo de
1956
Superficie: 163.610 Km2 (89º)
Población: 11.134.588 hab (81º) Densidad: 68 hab/Km2
PIB/cápita: 11.500 $ (127º)
Miembro de: OUA, Liga Árabe
Túnez, cuyo nombre oficial es República
Tunecina, es un país situado en la costa mediterránea africana, el más pequeño
del Magreb, limitando con Argelia al O y con Libia al SE. Tiene 1.300 Km de
costa.
Allí floreció Cartago, la gran enemiga de
Roma, fundada por los fenicios de Tiro en el siglo VIII a.C. Forjadora de un
Imperio, derrotada por los romanos en las Guerras Púnicas, fue destruida por
éstos el 146 a.C.
En la región floreció seguidamente la pujante
provincia romana de África, centro cultural y uno de los graneros de la
metrópoli. Invadida por los vándalos en el siglo V y reconquistada por los
bizantinos en el VI, el Islam llegó en el VII, consiguiendo con muchos
esfuerzos islamizar a la población nativa bereber, siendo la nueva ciudad de
Kairuan su centro religioso.
Miembro al principio de los califatos de Damasco
y de Bagdad, se fundó después un califato sui generis, de religión chiíta, que
acabaría trasladándose a Egipto.
Tras estar gobernada por varias dinastías, la
zona, como el resto de la costa norteafricana hasta Marruecos, quedó bajo
vasallaje del Imperio Otomano, el cual concedió amplia autonomía a las ciudades
berberiscas, dedicadas a la piratería y constituyendo un serio peligro para la
navegación mediterránea.
En el siglo XVI fue conquistada dos veces por
la Corona española, pero ésta no podía dedicar muchos recursos a esta zona, y
Túnez volvió a formar parte del mundo islámico, como vilayato turco
administrado por un gobernador.
La actividad pirática continuó hasta la acción
conjunta de varias escuadras europeas a principios del XIX, cuando ya hacía
tiempo que el gobierno imperial estaba en manos de administradores nativos,
conocidos como beyes.
En la segunda mitad del siglo, Túnez fue
objetivo del afán expansionista de Francia en el Norte de África. Gran Bretaña,
en el Congreso de Berlín de 1878, le dejó manos libres a cambio de obtenerlas
ella misma en Chipre.
En 1881 el ejército francés ocupó el país, y
en 1882, por el Tratado de El Bardo, lo convirtió en protectorado de Francia,
creando resentimiento en Italia, que aspiraba a hacer lo mismo.
Durante la Segunda Guerra Mundial, fue el
escenario de la última fase de la batalla del Norte de África entre el Eje y
los Aliados.
Tras el fin de la guerra, continuó bajo el control colonial francés.
En 1934, con la formación del Partido Neo
Destour (Nueva Constitución) por Habib Bourguiba, había comenzado la lucha por
la independencia, la cual conseguirá en 1957 como una monarquía constitucional,
convirtiéndose el bey en monarca.
Parte de los sellos utilizados durante el
breve periodo monárquico fueron los mismos que bajo los últimos años de dominio
francés, pero habiendo desaparecido las iniciales R.F. (República Francesa).
En el mismo año, tal monarquía fue derrocada
y se proclamó la República, con Bourguiba como Presidente.
Francia se mantuvo en la base naval de
Bizerta hasta 1963, cuando se vio obligada a abandonarla por las presiones
tunecinas.
La influencia del partido Socialista, que
convivió con el NDP, hizo que Bourguiba siguiera políticas de ese signo durante
los primeros años. Pero en la década de 1970 abrió la economía a la inversión
extranjera y permitió el desarrollo de un sector privado.
Bourguiba se mantuvo en el poder hasta 1987,
cuando su edad y los problemas de salud lo mantenían ya casi incapacitado. Su
Primer Ministro, Ben Alí, dirigió un golpe de estado palaciego con apoyo del
ejército. Bourguiba quedó alejado de la política y sujeto a asistencia médica
hasta su fallecimiento en el año 2000.
Desde que triunfó el golpe, Ben Alí asumió la
Presidencia con ayuda de su partido, la Asamblea Constitucional Democrática.
Aunque formalmente multipartidista, el régimen era considerado poco menos que
dictatorial, y los partidos de oposición apenas tenían acceso al Parlamento.
En política internacional apoyó a la
Organización de Liberación de Palestina (OLP), y le sirvió de anfitrión, cuando
la misma debió salir del Líbano por la invasión israelí de 1982. Impulsó la
unión de los países del Magreb, y, en lo social, continuó la política liberal
de Bourguiba.
Entre finales de 2010 y principios del año siguiente, se desarrolla una serie de protestas y disturbios que tendrán, como vamos a ver, amplias consecuencias, contando entre las primeras el abandono del país por Ben Alí, que huye a Arabia Saudita.
El movimiento se extendió rápidamente a casi todos los países árabes, desde el Mogreb hasta el Golfo Pérsico, con intensidad y consecuencias muy variadas. Se conoce con el nombre de 'Primavera árabe', que se puede considerar hoy fracasada, quedando algunos rescoldos sólo en el propio Túnez.
Entre finales de 2010 y principios del año siguiente, se desarrolla una serie de protestas y disturbios que tendrán, como vamos a ver, amplias consecuencias, contando entre las primeras el abandono del país por Ben Alí, que huye a Arabia Saudita.
El movimiento se extendió rápidamente a casi todos los países árabes, desde el Mogreb hasta el Golfo Pérsico, con intensidad y consecuencias muy variadas. Se conoce con el nombre de 'Primavera árabe', que se puede considerar hoy fracasada, quedando algunos rescoldos sólo en el propio Túnez.
En enero de 2011 un joven vendedor
ambulante, Mohamed Buazizi, se prendió fuego en público, hastiado por la falta
de oportunidades; logró sobrevivir tres semanas. No sospechaba que su
descontento se uniría al de cientos de miles de tunecinos que comenzaron a
protestar en calles y plazas, hasta que el 14 de febrero lograron la caída de
Ben Alí.
La denominada entonces ‘revolución de
los jazmines’ llenó de esperanza el ambiente tunecino. Fueron legalizados la
práctica totalidad de los partidos de la oposición y se celebraron elecciones a
una Asamblea Constituyente, que a su vez eligió un presidente y un gobierno
provisionales.
La Asamblea estaba muy fragmentada,
destacando el partido islamista Ennahda, seguido por tres partidos laicos.
La nueva Constitución se promulgó en
enero de 2014, reconociendo como medida primera la igualdad de sexos.
En agosto de 2016 se consigue formar un
gobierno ‘de unidad’, incluyendo, entre sus 26 ministerios, personalidades de
izquierdas, mujeres, jóvenes e islamistas moderados.
Pero la realidad del país era otra.Ya
desde 2013 asesinatos y huelgas pusieron en evidencia la polarización que
suponía el creciente enfrentamiento entre islamistas y laicos.
Desde 2015 los atentados que podemos
llamar jihadistas experimentaron un salto cuantitativo y cualitativo. Citaremos
sólo los más granados.
18 de marzo de 2015: atentado en el
Museo del Bardo. 21 víctimas, de ellas 17 turistas extranjeros.
26 de junio de 2015: 38 turistas muertos
en dos atentados contra hoteles importantes. Se decreta el estado de
emergencia.
24 de noviembre de 2015: artefacto
lanzado contra un autobús de la Guardia Presidencial. 12 muertos.
7 de marzo de 2016. Ataque a un hotel y
una comisaría en Ben Guerdan, cerca de la frontera con Libia. Entre los
fallecidos, 36 jihadistas que pretendían infiltrarse. En total, al menos 55
muertos. El primer ministro aseguró que el objetivo era establecer en la región
un ‘emirato del Estado Islámico’. El gobierno cierra la frontera con Libia y el
acceso a las regiones del sur.
13 de noviembre de 2016. Las fuerzas
tunecinas localizan tres arsenales cerca de la frontera libia, incluyendo
lanzamisiles y minas antipersona. Se prorroga el estado de emergencia.
No se olvide que más de 3.000 tunecinos
se han sumado a la campaña del ISIS en Siria- Irak, lo que ha hecho saltar
todas las alarmas en Túnez ante la posibilidad de un retorno que tendría, como
corredor de paso, la caótica Libia.
Sin embargo, hasta ahora y por
escrúpulos ‘progresistas’, el gobierno es reacio a ser visto como colaborador
en la ofensiva estadounidense de bombardeos que tiene lugar en Libia.
En otro orden de cosas y para reducir la
deuda exterior y el nivel de paro, se han anunciado severas medidas económicas,
pero se duda si logrará resistir a la
oposición sindical, las huelgas y los enfrentamientos de partido que han
bloqueado a los gobiernos anteriores al actual, presidido por Yussuf Chahed.
Túnez se ubica entre el mar Mediterráneo y el
desierto del Sahara. Cerca del 40% de su territorio es desértico; el resto está
constituido por tierras más o menos fértiles.
Al norte se encuentran una serie de cadenas
montañosas que ocupan la mitad septentrional, con alturas entre 610 y 1.544 m.
Entre ellas aparecen valles fértiles que producen la mayor parte de los
alimentos.
Conforme se avanza hacia el S, las montañas
son sustituidas por una meseta de unos 600 m de altitud media, la cual va
descendiendo hasta una zona con abundancia de lagos cubiertos con una costra de
sal, conocidos en árabe como schotts. La vegetación es esteparia.
En la zona meridional, los schotts se unen al
desierto, pero en el espacio de transición existen numerosos oasis, algunos muy
extensos, donde crecen cerca de 400.000 palmeras datileras, aparte de otros
cultivos.
Por el S se extiende el Gran Erg Oriental,
con poca biodiversidad y escasa población, mayoritariamente bereber, antaño
nómada, hoy asentada, con curiosos pueblos excavados, como Matmata.
Túnez tiene una economía diversificada.Aunque sus recursos naturales no sean inmensos, una gestión económica cuidadosa
ha dado lugar a una prosperidad razonable.
Los productos agrícolas principales son
trigo, cebada, aceite de oliva y frutas, pero necesita importar gran cantidad
de otros comestibles. Las tierras cultivables suponen 4,9 millones de Ha: 1,6
de cereales, 1,6 de olivares, 0,4 de huertos irrigados.
Cuenta con minas de fosfatos, hierro y zinc,
y es un exportador modesto de petróleo. El sector industrial procesa el fosfato
y produce derivados del petróleo. El control gubernamental sobre asuntos
económicos se ha ido reduciendo, mientras crecían la privatización y la
simplificación de la estructura fiscal.
El crecimiento real tuvo un promedio de 5% en
la década de 1990, a lo que contribuyó la puesta en marcha de una
infraestructura turística en la costa que se puede considerar modélica, al
aunar la capacidad con el respeto al medio ambiente.
Bajo el régimen anterior Túnez había construido una infraestructura turística muy acertada que atraía a gran cantidad de visitantes. Con los acontecimientos narrados, se deduce fácilmente que esos visitantes, y las divisas que aportaban, han desaparecido en gran parte, siendo difícil hacer previsiones para el futuro.
Los tunecinos actuales son descendientes de
bereberes y de árabes procedentes del E, sin que quepa olvidar las aportaciones
demográficas y culturales de los moriscos huidos o expulsados de España.
El crecimiento anual es del 1,1%; la
esperanza de vida, 73,9 años; la población urbana, el 65,3%. El 98% de los
habitantes son musulmanes.
Túnez ha destacado durante muchas décadas
por ser un país liberal y abierto, con frecuentes intercambios culturales con
el resto de los pueblos mediterráneos. En la actualidad, el ascenso del islamismo radical (que no se ha de confundir con religión
musulmana) aconseja adoptar un margen de espera antes de confirmar o de modificar, cara al
futuro, esa impresión.
TRINIDAD Y TOBAGO América del Sur
Independencia (del Reino Unido): 31 de agosto
de 1962
Superficie: 5.128 Km2 (172º)
Población: 1.220.479 hab (153º) Densidad: 238 hab/Km2
PIB/cápita: 32.600 $ (58º)
Miembro de: Commonwealth, OEA
La República de Trinidad y Tobago es un
estado ubicado entre el SE del Mar Caribe y el Océano Atlántico, sobre la
plataforma continental del E de
Venezuela (excepto Tobago), de cuya costa dista 11 Km. Constituye el extremo
meridional de las llamadas Antillas Menores.
Consta de dos islas principales: Trinidad (la
mayor y más poblada) y Tobago, de mucho menor tamaño y población, aparte de
varias islas más pequeñas.
Cristóbal Colón las descubrió en 1498. España
creó con ellas en el siglo XVI una provincia dependiente de la Capitanía
General de Venezuela.
En 1797, durante el transcurso de las guerras
del periodo napoleónico, los británicos ocuparon el territorio. Les fue cedido
en la Paz de Amiens de 1802. La Paz duró un año, pero los británicos nunca se
fueron.
La población indígena prácticamente
desapareció, como en las restantes islas del Caribe, siendo sustituida por mano
de obra esclava negra procedente de África en las plantaciones de caña de
azúcar y tabaco.
Durante el siglo XIX, a medida que resultaba
menos rentable la esclavitud abierta, se fomentó la inmigración de coolíes desde
la India y China; casi en la misma situación de servidumbre se encontraron los
inmigrantes portugueses, mientras que los franceses refugiados desde la
rebelión haitiana gozaron de mejor situación, aunque sin llegar al status de la
minoría inglesa.
Trinidad tuvo sellos propios, con esta
denominación, de 1847 a 1913. A partir de esta última fecha, figuraría la
leyenda ‘Trinidad y Tobago’.
Tobago, por su parte, contó con emisiones
específicas entre 1879 y 1898. Antes y después utilizó los de Trinidad.
La isla de Trinidad, como quedó dicho,
corresponde a la placa tectónica de América del Sur. Está atravesada por tres
distintos grupos de montañas, prolongación de las venezolanas, entre las que se
extienden llanuras y zonas pantanosas.
Las costas son relativamente poco
accidentadas, y llama la atención, dada su latitud y la temperatura de las
aguas marinas, la ausencia casi total de arrecifes de coral vivos; esto se debe
a la sedimentación de los barros procedentes del río Orinoco, los cuales, como
contrapartida, facilitan la existencia de una exuberante flora y fauna litoral.
Por lo demás, hay numerosos ríos y arroyos, y la mayoría de los suelos son
fértiles.
Tobago es montañosa, con valles profundos y
feraces que corren de N a S. La parte SO tiene un arrecife de coral. La
superficie forestal supone el 43%.
Ambas islas cuentan con un clima tropical
marítimo influenciado por los vientos alisios del NE. Están fuera de la ruta
habitual de los huracanes, que sólo en alguna ocasión las afectan.
Durante todo ese periodo, hubo graves
conflictos étnicos entre los descendientes de africanos y de hindúes.
En 1976, Trinidad-Tobago prescindió de la
monarquía, proclamando la República, aunque permaneció dentro de la
Commonwealth.
Saltó a los periódicos cuando, en 1990, los
miembros de una organización de afrotrinitenses convertidos al Islam, dio un
golpe de estado el 27 de julio, tomando como rehenes a varios ministros; el
Gobierno los forzó a rendirse el 1 de agosto.
El sistema establece la elección del
presidente por un colegio formado por los miembros de las dos Cámaras. A su
vez, el Presidente nombra al Jefe de Gobierno que pueda contar con mayoría en
las mismas.
La actividad agrícola más importante es el cultivo
de caña de azúcar, con elaboración de ésta y de ron. Siguen el cacao, los
cítricos y el café. La ganadería tiene un peso menor.
Son extensos los campos petrolíferos, y el país
cuenta con tres plantas de refinería y petroquímica, todo lo cual constituye la
principal exportación, incluyendo gas natural y asfalto. También se produce
algo de bauxita.
En la zona de las Antillas Menores, Trinidad
y la neerlandesa Curaçao son las que han alcanzado un mayor desarrollo
industrial, pero en la primera está asociado a una notable producción agrícola,
que falta en Curaçao.
Dada su situación geográfica, el país cuenta
con numerosas empresas de navegación y
de tráfico aéreo.
Son grupos étnicos dominantes los
indotrinitenses (descendientes de trabajadores de la India), con un 40,3%, y
los afrotrinitenses (que descienden de esclavos africanos), con un 39,5%. El
resto está compuesto por minorías de europeos, chinos, sirios, libaneses y
caribes, provenientes de habitantes indígenas, pero no reconocidos como
categoría diferenciada en el Censo.
Las principales religiones son la católica
(26%) y la hindú (22%). Son minoritarios los anglicanos y otras confesiones
protestantes, así como los musulmanes; todo ello aparte de creencias sintéticas
afrocaribeñas y del crecimiento de los mormones.
El inglés es la lengua oficial, si bien lo
más hablado es un criollo derivado del mismo, aunque su escritura carece de un
sistema normalizado. El gobierno exige que el español se enseñe en todos los
centros de secundaria, con lo que gana terreno día a día. Designado en 2004
Primera Lengua Extranjera, se ha anunciado su conversión en segundo idioma
oficial para el año 2020.
Trinidad - Tobago es famosa también por su
Carnaval y por ser lugar de nacimiento de la música calipso
.
Pero también se dan aspectos muy negativos:
como otras naciones de la región, se ha convertido en punto de transbordo de la
cocaína, lo que ha traído consigo violencia y gangsterismo. Los tribunales de
justicia se han visto atorados, mientras se producía una alta tasa de asesinatos
y aumentaba el nivel de corrupción de la policía. Como respuesta, el Gobierno
ha reintroducido la pena de muerte en 1999.