GILBERT
Y ELLICE Oceanía
Ya
en 1857, Gran Bretaña estableció un protectorado genérico sobre la zona, que se
formalizaría sólo en 1892, con el envío de un Comisionado Residente. El
conjunto de islas se convirtió en Colonia de la Corona en 1916. Antes, en 1911,
se había comenzado a emitir sellos específicos para las mismas.
El
establecimiento de ‘protectorado’ primero y ‘colonia’ después es un
procedimiento característico del expansionismo colonial británico, apareciendo
en diversos continentes.
En
efecto, el ‘protectorado’ supone una primera aproximación cautelosa, y sugerente
de respeto, a las peculiaridades indígenas. Después, cuando los nativos se
hallan confiados y más o menos resignados, ¡zas! viene la declaración de
colonia y los desventurados se encuentran de hoz y coz con toda la
administración colonial directamente encima de la grupa.
Dejándonos
de digresiones didácticas, cuando años más tarde llegó la época de las
independencias, hubiera parecido lógico en principio formar un país con ambos
archipiélagos, pero entonces surgió la dificultad: al Norte, los nativos de las
Gilbert eran micronesios; al Sur, los de las Ellice, polinesios. Unos y otros
no consideraron adecuado vivir bajo el mismo pabellón, como quedó de manifiesto
en las votaciones celebradas en septiembre de 1976.
Y
así, los polinesios de las Ellice constituyeron
la nación de Tuvalu en 1978. Los micronesios de las Gilbert, la nación de
Kiribati en 1979.
Esta
diferencia de un año explica que existan sellos únicamente para las Gilbert, como se puede ver a
continuación.
TUVALU Oceanía
Independencia
(del Reino Unido): 1 de octubre de 1978
Superficie:
26 Km2 (227º)
Población:
11.810 hab (222º) Densidad: 429 hab/Km2
PIB/cápita:
3.400 $ (135º)
Miembro
de: Commonwealth
El
país se compone de 4 arrecifes de coral y 5 atolones, con un área total de
2.544 Ha. Es el 4º país más pequeño en superficie, y el penúltimo (sólo tiene
detrás a la Ciudad del Vaticano) en cuanto a número de habitantes.
Su
altura máxima sobre el nivel del mar es 5 metros, siendo, después de las
Maldivas, el estado más amenazado por cualquier futuro aumento de ese nivel,
pudiendo la población ser evacuada, durante las próximas décadas, a Nueva
Zelanda, Niue u otras islas del Pacífico.
Disfruta
de un clima tropical marítimo, moderado por los vientos alisios de marzo a
noviembre, con abundantes precipitaciones durante los meses restantes. La
vegetación típica está compuesta por cocoteros.
Es
un Dominio; habitualmente utilizamos ese término para designar a los estados
que, aun siendo independientes, reconocen como soberano al del Reino Unido,
representado por un mandatario con nombres variados y con atribuciones asimismo
variadas.
El
Primer Ministro ha declarado su preocupación por el cambio climático,
subrayando la responsabilidad de los países contaminantes y de la ONU. La
población tiene pendiente decidir sobre dos cuestiones: la eventual
transformación en república y la conveniencia de trasladar a todos los
habitantes. Y es que las islas viven en continua alerta por los ciclones y por
el riesgo de inundarse; cuando las mareas altas coinciden con tormentas, parte
del país queda sumergida.
El
Parlamento tiene 15 miembros, pero cada isla cuenta además con un jefe, varios
subjefes y un Consejo de Ancianos. No hay partidos políticos, basándose las
campañas en la reputación personal y en los lazos familiares.
Tuvalu
no tiene fuerzas militares. Su policía cuenta con una Unidad de Vigilancia
Marítima para misiones de búsqueda y salvamento, pero con una sola lancha
patrullera suministrada por Australia.
No hay
agua potable, y la tierra es escasamente utilizable para la agricultura.
La
población, en su mayoría polinesia según se dijo, se ha más que duplicado desde
1980. Cerca del 97% pertenecen a la Iglesia de Tuvalu, una confesión
protestante, aunque existen influencias de las religiones indígenas.
El
tuvaliano es el idioma hablado en el país; el inglés es también lengua oficial,
pero sólo se usa en el parlamento y actos públicos.
La
economía, muy poco dinámica (con las excepciones que luego se verán), se basa
en una agricultura y ganadería de subsistencia, con importancia creciente de la
pesca, aunque el único producto exportado es la copra. Cuentan las remesas de
los emigrantes y la venta de sellos y monedas.
Respecto
a los sellos, podría decirse que parte del principio de ‘un sello para cada
islote y un islote para cada sello’, mereciendo al respecto un premio Guinness,
si no contara con un rival tan temible como San Vicente, en el Mar Caribe.
Veamos ejemplos aprovechando la ocasión para detallar nombres, superficies y
población.
Nanumaga 3 Km2
589 hab
En
otro orden, la economía de Tuvalu recibió una inyección muy importante en 2000,
tras la cesión de las letras ‘tv’ de su dominio de Internet (adjudicado por la
U.I.T.) a una empresa norteamericana por 12 años a cambio de 50 millones de dólares,
quedándose además con el 20% de la empresa en cuestión, que gestiona el dominio
cediéndolo no sólo a televisiones, sino también a sitios pornográficos.
Esta
conexión con la pornografía ha levantado protestas por la operación de parte de
la población del país, mientras que los partidarios aducen que así han podido
construirse carreteras.
Hablando
de infraestructuras, el Aeropuerto Internacional de Funafuti utiliza la pista
construida por los norteamericanos durante la Segunda Guerra Mundial.
El
turismo cuenta poco (unos 100 turistas al año), pero aún hay otros extraños
ingresos. Greenpeace sostiene que Tuvalu vendió al Japón en 2006 su voto en la
Comisión Ballenera, con las finalidades que cabe suponer, a cambio de
asistencia económica. Tuvalu lo niega.
No
tiene relaciones con la República Popular China, pero sí con China- Taiwan, que
ha concertado con ellos un programa de asistencia. También mantiene buenas
relaciones con EE.UU.
Sólo
hay un banco, en la capital, y no se aceptan tarjetas de crédito.
En la
vida cotidiana, es considerable la importancia de las costumbres tradicionales;
por ejemplo, cada familia tiene su propia tarea que llevar a cabo para la
comunidad (pesca, construcción de viviendas, etc.), transmitiéndose de padres a
hijos.
KIRIBATI Oceanía
Capital:
Tarawa
Independencia
(del Reino Unido): 12 de julio de 1979
Superficie:
811 Km2 (188º)
Población:
105.432 hab (180º) Densidad: 119
hab/Km2
PIB/cápita:
6.112 $ (106º)
Miembro
de: Commonwealth
Archipiélago
y país insular en la zona central del Pacífico, al NE de Australia. Está
integrado por 33 atolones coralinos y la isla volcánica de Banaba, diseminados
en un área de más de 3 millones de Km2.
Antiguas
islas Gilbert, como ya sabemos, tuvieron un problema muy grave de
superpoblación en la década de los 80; en 1988 se anunció que 4.700 residentes
del grupo principal serían reubicados en islas menos pobladas. Por esos años,
Kiribati fue señalado por la ONU como uno de los países más pobres del mundo,
lo que precipitó la llegada de recursos humanitarios de varias naciones.
Otro
informe de la ONU de 1989 indicaba que Kiribati sería uno de los primeros
países en desaparecer a causa de la elevación del nivel del mar como
consecuencia del calentamiento global.
En
1995, el presidente Teburoro Tito cumplió su promesa de modificar la hora. Se
dice inexactamente que Kiribati desplazó hacia el E la Línea Internacional de
Cambio de Fecha para que las islas dejaran de estar divididas por esa línea
imaginaria (lo que suponía para el país, no sólo dos horas distintas, sino dos
fechas).
Para
hablar con precisión, nadie puede modificar esa Línea, que, por convenio
iniciado en 1880 y ya universal, está y estará donde siempre estuvo: en el
meridiano 180. Lo que sí pueden hacer y hacen muchos estados es ajustar la hora
legal de su territorio (o de partes del mismo) tomando como referencia inicial
más o menos precisa los husos horarios determinados por la Línea de Cambio de
Fecha (meridiano 180º) y el Meridiano de referencia (0º: Greenwich).
En
el supuesto concreto que nos ocupa, el gobierno de Kiribati fijó la hora legal
de todas las islas con referencia a la zona horaria inmediatamente anterior (al
Oeste) de la Línea de Cambio.
La
operación hizo famoso al país, que resultó ser el primero que vio el amanecer
el 1 de enero de 2000 y el primero que recibió la fecha para comenzar el tercer
milenio. El hecho, aireado por los medios de comunicación, atrajo el 31 de
diciembre a gran número de visitantes (se supone que en costosos viajes en
vuelos chárter). Hay gente para todo.
Por
lo demás, la vida política de Kiribati no ha sido tan plácida como la de su
vecino Tuvalu: polémica sobre una ley que cerraba todos los periódicos,
sustitución del presidente por un Consejo de Estado, subida al poder de la
oposición.
El
actual presidente Tong ha empezado una gira internacional para encontrar una
nueva patria, cuando el nivel del mar lo aconseje. En marzo de 2012 se ha
planteado al Parlamento la compra de terrenos en Fiji para trasladar, llegado
el caso, a toda la población.
Aparte
de Banaba, antaño fuente de fosfatos hace tiempo agotados, el resto del
territorio son islotes de arena y arrecifes rocosos o de coral, buena parte de
ellos deshabitados, que emergen unos 2,5 m. El terreno es calcáreo, lo que
dificulta mucho la agricultura. Como curiosidad, Kirimati, en el grupo llamado
Islas de la Línea, es el atolón mayor del mundo.
El
clima es similar al de Tuvalu.
Kiribati
es un país superpoblado y con escasos recursos naturales. La economía dependía
en gran parte de la copra, pero, al disminuir la demanda internacional de este
producto a partir de 1993, fue preciso recurrir a cuantiosos préstamos del
Banco Asiático de Desarrollo.
La
ayuda financiera internacional, sobre todo del Reino Unido y Japón, ha
representado entre un 25% y un 50% del PIB en los últimos años. Los ingresos
por turismo son escasos, salvo en los cambios de milenio.
Étnicamente,
los isleños originarios representan el 97,7% de los habitantes, debiéndose
añadir un 1,5% de mestizos. Los de origen europeo constituyen un 0,2%.
La
mayoría profesa la religión católica (52%). Las iglesias evangélicas suman un
20%, habiendo además una variada presencia de iglesias de las llamadas
pentecostales. El animismo y distintas creencias espiritistas suponen el 13%.
La
esperanza de vida es de 60 años, la mortalidad infantil, alta; el nivel
sanitario deja que desear, con notable escasez de médicos.
ISLAS
SALOMÓN Oceanía
Capital:
Honiara
Independencia
(del Reino Unido): 7 de julio de 1978
Superficie:
28.450 Km2 (152º)
Población:
552.438 hab (166º) Densidad: 17 hab/Km2
PIB/cápita:
2.047 $ (155º)
Miembro
de: Commonwealth
País
insular en la zona de Melanesia. Su territorio está formado por más de 990
islas, repartidas entre dos archipiélagos: el de las Salomón propiamente dicho,
al SE de Nueva Guinea, y el de las islas Santa Cruz, bastante más al E.
Exploradas
en el siglo XVI por Álvaro de Mendaña, varias expediciones de misioneros
visitaron las islas. Los habitantes opusieron una fiera resistencia a todo
intento de penetración europea, por lo que se ganaron la justificada reputación
de ser hostiles y caníbales. No hubo más intentos hasta el XIX.
A
mediados de esta centuria, volvieron a aparecer, no sólo misioneros, sino
también los llamados ‘blackbirders’, cazadores de esclavos para las
plantaciones de Australia y las Fiji. Esta actividad provocó, como es lógico,
represalias y masacres. La situación llevó a Gran Bretaña a promulgar en 1872
una ley que constituyó la base para el establecimiento del protectorado
británico, que tuvo lugar en 1893, sólo sobre la parte meridional, pues la
septentrional quedaba bajo jurisdicción de Alemania.
En 1899, el Imperio Alemán cedió sus islas al Reino Unido a cambio de la renuncia de éste a Samoa Occidental. Bajo el protectorado, los misioneros se instalaron en las islas y convirtieron la mayor parte de la población al cristianismo.
En
1913, el protectorado se convirtió en colonia.
A
lo largo de esta época, empresas británicas y australianas empezaron a crear
plantaciones de cocoteros, pero el crecimiento económico era lento y apenas
revertía en el bienestar de los indígenas.
Durante
la Segunda Guerra Mundial, la mayor parte de los colonos fueron evacuados a
Australia. El territorio fue escenario de una batalla sangrienta de 6 meses, la
de Guadalcanal, que, ganada por los norteamericanos en 1943, marcó el límite de
la expansión japonesa en el Pacífico.
Tras
el fin de las hostilidades, se restauró el gobierno colonial británico. La antigua
capital, destruida por la guerra, fue reemplazada por Honiara, en la isla de
Guadalcanal, en el emplazamiento de lo que había sido una base militar
americana.
De
1945 a 1950, un movimiento independentista organizó campañas de huelgas y
desobediencia civil. Ante la persistencia de los desórdenes, los británicos
sacaron de la cárcel a los líderes y acordaron con ellos en 1951 un principio
de autonomía, que luego se ampliaría en 1976. La independencia llegó en 1978,
pero manteniendo a la soberana británica como Jefe del Estado.
Las
fuertes rivalidades entre las islas desencadenaron una revuelta civil que llegó
a situaciones de caos: funcionarios sin cobrar, reuniones del gobierno
celebradas en secreto por temor a los revoltosos, fuerzas de seguridad fraccionadas
por su fidelidad a una u otra facción, etc. En julio de 2003, el Gobernador
General lanzó una petición oficial de ayuda a la comunidad internacional.
Fueron
Australia y Nueva Zelanda quienes se encargaron de dirigir un contingente
internacional de 2.200 hombres, que también integraba componentes de otras 20
naciones del Pacífico. La fuerza arrestó a los jefes rebeldes, decomisó armas y
supervisó un lento retorno del orden; también se colocó a extranjeros en
puestos de gobierno y se incluyó asistencia financiera.
Pese
a todo esto, las perspectivas siguen siendo dudosas: el país sigue casi en
bancarrota, y los motines tras las elecciones de 2006 convierten en humo
algunos de los avances conseguidos desde 2003. Aparte de los problemas de
descontrol y corrupción, el país ha de luchar contra la deforestación y la
fuerte incidencia de la malaria.
Tiene
en su conjunto una superficie similar a la de Albania, pero la distancia entre
las islas más occidentales y las más orientales llega a 1.500 Km. Los volcanes,
con grados variables de actividad, están situados en algunas de las islas
mayores, mientras que las más pequeñas son atolones minúsculos cubiertos de
arena y cocoteros.
La
mayoría de la población depende de la agricultura, la pesca y la silvicultura.
Las islas son ricas en minerales: plomo, zinc, níquel y oro. La economía se
recuperó parcialmente en 1999, gracias al aumento de la producción de oro y a
la subida del precio del mismo, pero, el mismo año, el cierre de la mayor
plantación de palmeras aceiteras lanzó una sombra sobre las perspectivas de
futuro. Por supuesto, la desastrosa situación política no facilita el
crecimiento económico.
Existen
70 lenguas vivas; naturalmente, hay una lingua franca comúnmente llamada
Kanaka. Debido al alto nivel de analfabetismo, el medio de comunicación más
difundido es la radio. No existe ningún canal de TV; sólo se pueden captar, y
con dificultades, canales por satélite.
La
religión se divide en un 96% de cristianos (anglicanos, 45%; católicos, 18%) y
un 4% de seguidores de religiones indígenas.